martes, 9 de diciembre de 2014

En busca de la feminidad Capitulo Final

Silvia estaba sentada frente al colegio, miro su reloj y vio que ya era casi hora de salida de los estudiantes, la campana sono y ella se acomodo. los estudiantes comenzaron a salir, Silvia los observaba esperando ver a alguna de sus amigas. Finalmente vio salir a
Lina, al verla se paralizo sentía que podía moverse solo se quedo allí observándola por  un rato, Lina abrió su carro y se marcho. Silvia se sentía terrible al verla  no ir a hablarle, volvió su mirada hacia la escuela y después de unos minutos salió Ana. Silvia tomo aire y se dirigió hacia ella. Ana se estaba despidiendo de otros estudiantes. Silvia por atrás le tapo los ojos con las manos.

La chica rio - Se que eres tu Lina - dijo con una pequeña risita.

Silvia retiro sus manos de los ojos de Ana y esta se dio la vuelta, su cara lo decía todo felicidad y sorpresa. Las dos chicas se abrazaron.

- Regresaste - Decia Ana sin soltar a su amiga. - Te extrañamos, espera que Lina te vea. Dijo separándose de Silvia

Silvia solo sonrío. Ana la vio bien. - No conseguiste la poción?  - se dio cuenta y se entristeció - Lo siento.

Silvia la tomo del brazo. - Si la conseguí, solo que aun no la he tomado - Dijo sonriendo y sacando la botella con medio frasco lleno del liquido morado.

Ana lo tomo entre sus manos y lo observo mientras ambas caminabas - porque esta a la mitad?  

Silvia miro a su amiga, - la otra mitad la tomo otra chica, que me ayudo a conseguirla, también necesitaba del antidoto.

Siguieron caminando - porque aun no la has bebido?

- No hace mas de una hora llegue a la ciudad, y la única forma para que el antídoto funcione es que me lo beba en la ciudad donde sufrí mi transformación, pero cuando llegue acá lo primero que pude hacer es venirlas a buscarlas.

Ana tomo de la mano a Silvia. mientras la escuchaba. - si me la tomo hoy al amanecer ya seré Sergio de nuevo, pero por ahora debo buscar donde quedarme esta noche, no creo que mi papa me reciba en este cuerpo.

- Quédate en mi casa - dijo Ana. - Mis papas están de viaje esta semana, estoy sola, puedes quedarte hasta que puedas volver a tu casa.

Silvia la tomo de las manos y le agradeció.

Las chicas llegaron a casa de Ana, Silvia se sentó en un sillón en la sala, - Sabes llamare a Lina. - Dijo Ana tomando el teléfono en sus manos. Silvia se levanto de un salto y le quito el telefono.

- Aun no, no quiero que me vea de esta forma, quiero que cuando me vea… vea a Sergio… quiero que cuando me vea logre ver que aun hay esperanza para volver a ser Leo.

Silvia soltó una carcajada - no creo que ella quiera volver a ser Leo, pero creo que tienes razón- dijo Ana sentándose de nuevo. Se quedo viendo a Silvia - y… que esperas?.  Y dirigió su mirada hacia la botella

Silvia tomo entre sus manos la botella, la abrió y un pequeño humo morado salió, temerosamente olió el contenido, vila a su amiga que no le separaba los ojos. paso saliva y tomo un sorbo, dejando un cuarto del liquido para Lina.

- Y? te sientes diferente?- pregunto Ana. La respuesta de Silvia fue una carcajada.

- Es curioso fue lo mismo que le pregunte a Angela cuando lo tomo.

- Entonces funciono en ella?

Silvia asentó, si volvió a la normalidad… los ojos de Silvia se aguaron al recordar a Angela. Ana vio que su amiga se molesto con la mención de la chica. 

- Cual es la idea ahora?- pregunto Ana

- Por ahora solo volver a ser Sergio, después volveré con Angela

- Te volverás a ir? pregunto enojada - acabas de llegar no crees que seria bueno que te quedaras por un rato.

- Si porque no. respondio.

El día se paso, las dos chicas hablaron de todo hasta altas horas de la noche, depuse de un largo día se fueron a dormir. Silvia se quedo en la habitación de huéspedes, ambas se despidieron y se fueron a dormir.

Acostada en la cama Silvia recordaba todo lo que le había pasado desde el primer día en que se convirtió en chica, y poco a poco se fue quedando dormida esperando al día siguiente cuando despertara como chico.

Sus ojos se abrieron, ya había amanecido, tomo su teléfono entre sus manos para ver la hora, ya era bastante tarde y Ana ya debía estar en el colegio. Se levanto de un salto y se digno al baño, tenia sentimientos mezclados, emoción y angustia, cuando se paro frente al espejo no podía creerlo, había vuelto, una sonrisa se dibujo en su rostro. 

Rápido tomo sus cosas y salió de la casa de Ana hacia la de el, sabia que a esta hora no habría nadie en su casa y podría entra sin ser visto. Subio por las escaleras y entro a su antigua alcoba, donde finalmente pudo volverse a vestir como chico, toda la roa que tenia de mujer la guardo en una maleta que equipaje, mientras guardaba todo vio la pequeña botella y la puso en un lugar seguro.

Tomo de nuevo su teléfono y le marco a Ana, pero le mandaba a correo de voz, no sabia que hacer, estaba emocionado, no sabia si ir a la oficina de su padre o al colegio donde todos sus amigos estaban, se decidió por la primera.

Al verlo su padre lo abrazo y ambos sonrieron de felicidad, Sergio le contó sobre “las vacaciones” y su padre ponía atenta atención mientras almorzaban juntos, Sergio dejo a su padre seguir trabajando y tomo rumbo hacia su antiguo colegio. Estaba ansioso por ver de nuevo a Lina y  sus demás amigos.

Estaba allí frente a la puerta, era hora de receso, los que significaba que todos los estudiantes estaban en el patio, Sergio camino por los pasillos y allí vio a uno de sus mejores amigos Ricardo, los dos se saludaron amistosamente y poco a poco sus amigo fueron rodeando hasta formar un tumulto, Sergio hablaba con todos ellos, volteo a mirar hacia su derecha y vio a Lina salir dentro del grupo de Gente, ambos se miraron y parecía que el resto se hubiese congelado en el tiempo, Lina corrió hacia el y lo abrazo. 

-que demonios pasa? tu…ustedes - decía Ricardo confuso, Ana se paro al lado de Ricardo. - Como es que se conocen? - pregunto el chico. 

Ana lo miro - de que hablas no creerías que el mejor amigo de Leo no conocería a su hermana- diciendo Ana se alejo de Ricardo y el solo veia como Ana iba en dirección a Lina y Sergio. 

- Espero que tengas una explicación por haberte tomado tantas semanas mas de vacaciones” Ricardo dijo celoso. Lina seguía abrazado a Sergio - No tienes que decir nada, solo me alegro que volvieras- dijo sin dejarlo de abrazarlo; el vio a los ojos de Lina - a mi me da gusto volver- concluyo Sergio.

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